Tras un encuentro con el Satanicús, Lucy, es forzada a cooperar en una competencia de habilidad musical en el inframundo, a cambio de pasar por alto su atrevido comentario con respecto al rap latino. Acompañada de su mejor amiga y del Diablo, tienen que buscar la manera de salir de este lío, mientras aprende importantes lecciones de amistad, tolerancia y venganza.
Cuando "The Chamuco" necesita representantes para la competencia anual de demonios, deidades, espíritus y dioses (D.D. E.D.) que se celebra cada año; sino no sería anual, recluta dos jóvenes estudiantes de preparatoria para que representen su improvisado equipo. Abril, quien es una vieja conocida del príncipe de las tinieblas, no tiene problema con representar al equipo del señor oscuro. Por otro lado, Lucy, se siente arrastrada y a la vez comprometida a acompañar a su amiga a cualquier lugar que sea necesario.
Desde el día que Lucy insulto la música de Abril, su vida hasta ese entonces rutinaria, se convirtió en un completo caos. Jamás habría imaginado que su amiga de la infancia, de la que creía conocer hasta el color de su ropa interior, era una íntima amiga del diablo y mucho menos se habría imaginado que ese día de escuela, el examen de flauta de pan, pasaría hacer el menor de los problemas; ahora estaba obligada a representar junto a su amiga al equipo del Diablo, en un concurso de música, donde mientras todos los seres sobrenaturales no ven esto como más que una manera de pasar el rato, para Lucy es una cuestión de volver a su vida monótona o pasar el resto de la eternidad condenada al sufrimiento eterno.