Con algo de duda, abrió con cuidado la ridícula y colorida bolsa de papel con dibujos de pollitos para ver su contenido, dentro de ella se encontraba lo que suponía era un emparedado, envuelto torpemente en una servilleta con el mismo tonto estampado. Por extraño que suene, el tonto gesto provocó un "molesto" calorcito en su pecho, era la primera vez que alguien le entregaba algo que hizo especialmente para él.All Rights Reserved