No podía creer lo que estaba viendo frente a sus ojos, Draken cayendo al suelo, la sangre saliendo de los tres orificios de bala y el...estaba perdiendo a la persona que más amaba. -Te amo Takemichi. -¡No me dejes solo! Te amo tanto. Una gran sonrisa apareció en el rostro del más alto y con eso cerró los ojos para no abrirlos más. -¡Takemichi despierta!