Lea y Phil no tienen tiempo para ser adolescentes. Philip Urist es la imagen paterna de la familia. Lea Williams acompaña todos los días a su tía al Instituto del cáncer. Instituto donde se conocen de la peor forma. De a poco y mutuamente conocen los exquisitos placeres que les otorga la vida. Toma una sonrisa. Sueña incluso en las circunstancias más difíciles. Y disfruta el hoy y el ahora.