Las cosas fueron muy difíciles desde el principio. Ser quirkless en un mundo en el que nacer con una peculiaridad es la norma lo llevó al peldaño más bajo de su sociedad
Aquella monstruosa sed de justicia no titubeó un solo instante. Al contrario, carbonizó su sangrante corazón
La fría y cruda realidad golpeó su idealista forma de pensar con brutalidad. Ser negado por su más grande ídolo fue una píldora imposible de tragar completamente
Y esa pizca de duda fue lo que mantuvo a flote aquella sed de justicia
Experimentó la total y aplastante soledad. Ninguna persona debería vivir algo así a una edad tan corta y frágil
En consecuencia, él junto a su creciente deseo de justicia, se quebraron
En vez de tocar las estrellas, cayeron en picada a un insondable y oscuro abismo. Un abismo lleno de horrores que, tristemente, se esconden en una sociedad podrida por el poder
Alguien debe limpiar la basura, ¿Verdad?
La oscuridad escucha...