Miro hacia arriba, Él sigue subiendo, Con un endeble sonido que golpea a mi tonificado silencio, Como si estuviera a punto de romper la cuerda. Le espero ansiosa, Pero nunca cae. Sería fácil quedarme observando, como siempre; Pero, eso ya no forma parte de mí. Subo. Él aún está lejos. Pasan 2, 3, 4 horas ¿qué sé yo? Nunca estoy atenta en medir el tiempo. ##### ##### No me oye. Sigue subiendo. Yo sé lo que le espera, Pero estoy a punto de alcanzarle. Tomo su pie. Parece que Intenta mirarme, Pero sus ojos ya perdieron la habilidad de enfocar. Y yo, ingenua, Me perdí en la intensidad de su única noche Le suelto. Él ya se asoma a la cima. El verdugo se alista para degollarle. Sigo perdida, Pero de mis ojos brota una sutil sustancia líquida. La cuerda se rompe.