Mi nombre es Leonora Hachania.
Soy hija de un villano secundario menor, pero tengo un gran deseo de poder. ¡No puedo dejar a los Hachanias tan insignificantes como la original!.
-¡Nadie a la izquierda!
-¡Ahora!
-¡Nadie a la derecha!
-¡Hazlo ya!
Mostrando mis lentes de sol hechos con tinta, levanté la voz.
-¡Enoch, no llores!
El tercer niño, que hizo un contacto visual débil conmigo, se sorprendió y olió su nariz que moqueaba.
-¡Waahh, está bien no voy a llorar!
Lo logré.
-¿Se suponía que iba a ser esta semana? Es una basura.
Jadear -!Sálvame, sálvame!
-Hermano, ¿por qué no lo matas rápido? porque él quiere ser igual que tú.
¡Mis hermanos mayores, que solían ser secundarios, se convirtieron en los villanos más grandes del mundo que incluso pueden golpear por los aires al protagonista masculino! Sin embargo, mi tonto padre villano fue todo un desafío.
-Lini, qué más estás planeando hacer...
-Jojo, no importa. Estás planeando algo malvado como mi hija. Eso es bueno.
Se convirtió en un villano de personalidad confusa.
¡Ja ja! Bien. ¡Debo usar la información original para hacer que mi familia sea importante y aumentar mi riqueza!
Traté de escapar del cuerpo del límite de tiempo disfrutando de la vida de un verdadero villano.
-Sé que la princesa es una persona amable, por lo que desear que solo seas amable conmigo sería codicioso.
Creo que el arma humana que fue revivida para la familia está un poco rota.
-Pero si no hay un tema con el que ser amable...
La brillante llama roja de su mano quemó el mapa del mundo.
-¿No deberías ser amable contigo misma?
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...