En tu sueños-dijo el moreno con orgullo-
¿Quieres apostar?-rio- Vamos, Bruno, tu y yo sabemos que la única razón por la cual finges que no te agrado es porque tienes miedo a enamorarte de mi-dijo victoriosa-
Sabes, Gina, eres muy graciosa porque en mi vida, me enamoraría de alguien tan superficial hueca engreída y plástica como tu
-rio con amargura- Apostemos entonces, brunito, dame dos meses y te juro que te haré tragar tus palabras.
-Sabes, sera tan divertido verte intentarlo, que acepto, pero espero que entiendas desde este momento que serán dos meses perdidos.-dijo mirándola fijamente a los ojos, esos ojos verdes que detesto desde el primer momento-
-Terminaras enamorándote de mi-solto con una sonrisa, esas sonrisas que derriten a cualquier hombre, menos a el, o al menos eso pensaba-