Emma siempre fluyó con las olas, era una con ellas; le encantaba nadar y bucear, disfrutaba sentir el cosquilleo de las aguas, hasta que las mismas olas que se suponía eran sus aliadas se llevaron una parte importante de su vida. Se llevaron a su madre y ese cosquilleo se volvió un mal presentimiento. Pasaron meses que luego se convirtieron en años, dos años hasta que volvió al mar, gracias a él, esa persona que la ayudo a superar sus traumas y descubrirse a sí misma. Caleb le mostró que todos tienen defectos en especial el, pero también que todos cometemos errores y que podemos enmendarlos. ¿El perdón podrá llenar su alma para ayudarla a enfrentar las mentiras que le habían sido impuestas? ¿Podrá tomar duras decisiones para afrontar el sufrimiento? Fecha de publicación: 07/02/22