El matrimonio puede ser un sueño, un anhelo, un deseo arraigado en lo más profundo de un corazón. Puede ser la promesa eterna de un amor real y el compromiso fiel de mantenerse juntos pero a veces, solo a veces, no es más que una cadena al cuello, pesada, fría pero sobre todo...imposible de quebrar y para bien o para mal Joel y Erick tendrán que aprender a vivir con ella.