Después de un comienzo de verano bastante duro, de miles de altibajos, Iris comienza a vivir un poco. Hasta que conoce al que pensaba que sería su salvación cuando en verdad sería su perdición durante largos meses. Dolor, llantos, lagrimas, risas, besos, abrazos; caos por todas partes define el dichoso agosto, pero, ¿solo agosto?