●Yo sere tu perdición, al oir mi voz caeras en la tentación, déjame amarte con el filo de mi lanza, mi compasión liberará tu alma de tu maldición, ven sigue mi voz, llora en mis brazos y tus lagrimas descansarán en mi pecho, nadie te perdonará por las vidas q robaste pero ahora descanso eterno tendrás y la oportunidad de amar volvera, eres libre, ya no serás un demonio, como humano rencarnaras y a tu hijo encontrarás, tu hora de descansar ya llegó.-el demonio que lloraba en sus brazos, se desvanecio en una brillosas y blanquecinas cenizas blancas q se extendieron en el aire como pólvora, liberando el alma de ese ahora humano. Desde lejos Uzui observaba como ella obra por el alma de ese demonio, sin duda alguna el Patron no se equivocó al elegiría como la Pilar Sirena, el poder hipnotisante de su voz al cantar esas melodías era todo un peligro, un hermoso y excitante peligro.