Todo empezo, un dia lluvioso, me desperte, siendo las cuatro de la mañana. Nunca me habia levantado tan temprano pero no podia volver a dormir y decidi que saldria al parque a dar unas vueltas, o a respirar aire fresco ya que por aqui no roban mucho, es un sitio tranquilo.
Me pongo las zapatillas, unos jeans, y una polera por el frio, bajo despacio las escaleras, cuidando no hacer mucho ruido ya que mis padres y mi hermano duermen, cierro la puerta con cuidado, y salgo. Aun esta algo oscuro, pero se puede ver lo suficiente para caminar. Entro en el parque, un lugar grande, con frondosos arboles que lo hacen un buen lugar para esconderse, cuando escucho una melodía, una guitarra... , Dios mio que bello, sigo caminando en direccion a la musica buscando encontrar a su hacedor hasta que tropiezo con una raiz y caigo de cara, la música se detiene.
- ¿Te encuentras bien?- me tope con ojos verdes que me estudiaban
-Y..yo?- dije tratando de articular palabra
-Si, tú, venga, te ayudo -
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...