- Respira. Inhala, exhala. Aquí viene otra contracción, esto es insoportable. Trato de concentrarme en algo bueno, canalizar todo en sujetarme del asiento o cualquier cosa que me haga sentir mejor. - ¡MALDITA SEA, NO PUEDO! - Ahora que lo pienso mejor, nos hubiéramos quedado en el apartamento, está más cerca del hospital o hubiésemos pedido una jodida ambulancia. - Summer, con gritarme no logras nada.- dice entre dientes para no gritar igual que yo y una sonrisa algo super aparece en mi cara, es increíble que apesar de tantas situaciones siga con nosotros. No debería reírme, sé que estoy colmando su paciencia, ya de por si molesto estando tranquila, pero quién diría que él y yo estaríamos en esta situación ni siquiera debería. - No le hables así, ¿no ves que está sufriendo?- dice Malena sentada de copiloto - ¡A la izquierda! - grita y se escucha el rechinar de las llantas. Mientras ellos intentan que lleguemos vivos a urgencias cierro los ojos, aprieto otra vez el asiento y suelto otro quejido. Derrepente siento el vestido y todo debajo mojado. La madre que me parió... Ya viene.