En un mundo apocalíptico en el que matar es completamente normal, Niall se enfrenta a sí mismo, convencido de que su forma de ver la vida dadas las condiciones del actual mundo es la correcta, se enfrasca en sí mismo y no reconoce que afectar a los demás no es lo adecuado, pierde su humanidad y lucha consigo para recuperar la bondad que creía perdida. Harry es un hombre de grandes valores, a pesar de la difícil situación en la que está el mundo no pierde su enfoque, pasa diferentes pruebas a causa de su moral, no le es fácil hacer lo correcto porque no es gratis hacerlo, las pérdidas lo cansan y cuando está a punto de errar su más difícil prueba llega Niall a demostrarle que es lo suficientemente fuerte para seguir adelante.