Draco Malfoy, un rubio de ojos claros tan odiado como amado. Un ser insoportablemente lindo, cobardemente tierno, y tontamente atrayente. Porque hay que admitirlo, a pesar de lo molesto que es, gracias a eso, muchos le tomamos cariño. Molestando e insultando a todos, pero cuando alguien lo enfrenta corre tras su padre como una gallina cobarde, o más bien como un hurón cobarde. En fin, sea como sea, en este lugar se lo querrá y apreciará tal como es, aunque saque de las casillas a cualquiera que lo conoce. ¿Y porque no dedicarle unos capítulos siendo el mismo con la chica que le gusta? Si es raro, pero hasta la persona con más odio en su corazón puede amar, aunque se niegue a hacerlo.