Manu busca curro

Manu vive en un lujoso ático en el barrio de Gràcia con su familia perfecta, pero su realidad está lejos de ser maravillosa. A sus dieciocho años solo se ha sacado la ESO y todo el mundo lo tiene por un completo inútil que no vale para nada más que para estar todo el día jugando a la consola y comiendo comida basura.
Los días de relativa calma para Manu, un perdedor de manual (gordo, feo, virgen, pero también zafio, borde y malhablado), tienen sus horas contadas pues sus padres le dan un ultimatum que le cambiará la vida para siempre: o encuentra un trabajo o se va a la calle.
Manu tendrá que hacer frente a las dificultades de encontrar un empleo en la ciudad condal teniéndolo todo en contra, desde su temperamento y torpeza social hasta una familia que simplemente lo considera como una oveja negra que no encaja en su perfecto redil.