El pueblo Domus siempre fue tranquilo muchos dirían que incluso llego a ser un poco monótono y aburrido, Kellan pensó que serían otras vacaciones de verano normales y comunes en las cuales se divertiría con sus amigos antes de volver a su aburrida vida universitaria pero desde el momento en que se topó con esos ojos tan familiares pero a la vez un tanto desconocidos supo que nada sería ni normal ni común y es que justo frente a él estaba su bella ex novia. Aquella con la cual compartió un romance a la tierna edad de 15 años, romance que vio su final cuando tenía 16 años. La dulce chica que pensó nunca más volvería a ver en su vida... Nadie puede culparlo de desmayarse... Después de todo... Se supone que ella estaba muerta...