La universidad es como iniciar una nueva vida para Alana, la cual ya no puede esperar a que sus clases comiencen a pesar de que algún día se hartará de ellas. Lo único que quiere es terminar la universidad para enorgullecer a su madre, tener un buen trabajo, casarse y tal vez, sólo tal vez, tener hijos. ¿Qué ocurriría si una persona entra descaradamente a su vida, y le altera sus planes? Alana se siente atraída por lo oculto. Es una persona orgullosa de sí misma. Pero, hay un lado de Alana que nadie conoce. Detrás de todo ese rostro inocente, hay algo mucho mejor. «Las chicas buenas son chicas malas que no han sido atrapadas.»