Hay momentos en los que te paras a pensar en las pruebas y dificultades que te has enfrentado a lo largo de tu vida y las que te han hecho ser quien eres. Hoy puedo decir que estoy orgullosa de los momentos en los que he gritado de dolor a la vida, en los que he actuado sin pensar, en los que he fracasado, porque gracias a ellos he aprendido y he evolucionado. Orgullosa de mi intensidad, de mi manera de pensar, porque aunque tropiece mil veces por el camino nunca me he detenido. Feliz de apreciar los pequeños detalles de la vida. De poder disfrutar los triunfos de los demás y no sentir envidia por nadie, porque recibiré lo que merezca. Feliz porque se que soy capaz de dar el amor más sincero a la persona que lo merezca. Tengo mis miles de defectos, no soy perfecta ni pretendo serlo, pero hoy puedo decir.. que siempre voy a ser la dueña de mi vida y que si el mundo me abandona encontré en mis brazos el hogar.All Rights Reserved
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