En Fallen, todos, absolutamente todos, los omegas y alfas de buena familia eran pactados en matrimonio, desde el momento de su nacimiento, se les hacia crecer juntos, de manera en que, si no surgía el amor de forma romántica, seria algo amistoso, no destinado al desastre o al menos tolerable, es aquí, todo inicia aquí; esta es la historia del príncipe y su rata... okay... al menos desde la perspectiva de Harry es así, os cuento. Harry Edward Styles, omega, perfecto, dulce, bondadoso y amable, destinado a casarse con su mejor amigo, por quien sospecha sentir algo más que amistad, su prometido, su confidente, el chico de brillantes ojos azules que lo hace suspirar y reír sin parar, ese hermoso rubio llamado Niall... rompió el compromiso y su corazón, todo es un desastre, un completo desastre de altas magnitudes, un escandalo, pero lo peor de todo... ahora esta comprometido nuevamente, con alguien a quien no ama, no conoce y no quiere conocer, mas su desgracia no parece tener fin, cuando sea entregado en matrimonio al príncipe Louis, un alfa cretino, arrogante y descaradamente coqueto, definitivamente no quiere casarse, pero no tiene más opciones. Louis no quiere casarse con nadie, es por eso que desde que recuerda ha tratado de convencer a sus padre de que no necesita un omega, suficiente tiene ya con Liam, que no es su esposo, pero se queja más que uno, cuando conoce a ese niño respondón y malhumorado de ojos verdes su vida comienza a cambiar, si bien, le gusta, pero también a veces le provoca aventarlo por una ventana, ellos no se llevan bien desde el inicio, mucho menos cuando tengan que casarse ¿Cómo espera que gobierne con omega quejumbroso a su lado?
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