Dos jóvenes totalmente distintos, con vidas totalmente diferentes, que por simple curiosidad sus caminos terminan encontrándose. Dos opuestos que se atraen como si de eso dependiera su existencia, un curioso sentimiento que los come por dentro, una obsesión que no les permite separase del otro, una atracción que los hace desear mas el volver a verse.
Aquella prolija, limpia e imponente apariencia había llamado la atención de Park Jimin, quedando atónito al ver por primera vez a aquel hombre, con un semblante serio, un paso firme y unos oscuros ojos que lo habían atrapado total mente desprevenido. Min Yoongi lo había flechado con solo una mirada, un escalofrió que lo hizo perder los sentidos, solo un par de segundos que cambiaron por completo su vida.
¡BANG! - El sonido de un fuerte disparo lo aturdió, todo su cuerpo había quedado inmóvil y su vista se torno borrosa, lo único que podía diferenciar era la figura de aquel hombre. Podía notar como con aquel reconocible caminar se acercaba lentamente hasta el y como su rostro cambiaba completamente de uno serio a uno de sorpresa.
¿Qué haces tu aquí? - La voz ronca pero a la vez suave de Yoongi. Su corazón latía tan rápido que sentía dolor en su pecho, y su respiración apenas salía. Separo sus labios levemente, sintiendo como un suave suspiro escapaba de ellos y con dificultad un sonido.
Yo - Su cuerpo temblaba, estaba asustado, no podía creer aquella escena, no era algo que se podría superar con tanta facilidad.- Te seguí hasta aquí. - Su mirada se levanto, mostrando unos brillosos y cristalizados ojos. Sin alcanzar a resistirse sintió aquellos grades brazos rodear su esbelta y pequeña figura, como lo presionaba conta su cuerpo y lo contenía cálidamente en su pecho, Yoongi lo había abrazado y lo único que podía sentir ahora era lo protección que le daba, como si todo el resto del mundo se esfumara, aquella oscuridad se volvía calidez, aquel miedo ahora no era mas que un pequeño
Kim Namjoon sabía que su vida se estaba derrumbando con cada día que pasaba, desde que estaba con Hoseok lo notaba, aunque siempre tapaba sus ojos y simulaba no ver que su felicidad lo había dejado hace mucho tiempo.
Cada golpe que recibía hacía que su corazón dejara de sentir algo diferente al dolor, ya no se molestaba en tapar el sol con un dedo, únicamente se dedicaba a ver cómo su vida se iba eclipsando cada vez más, y no había nada que pudiera hacer para evitarlo.
Min Yoongi hacía todo lo posible por quedarse al lado de su mejor amigo, aunque cada día se le hacía más duro, y guardarse lo que sentía por él significaba una tortura. Lo único que podía hacer era apoyarlo, y luchar contra la corriente, que siempre intentaba separarlo de la persona que amaba desde hace casi diez años.
¿Era hora de dejar de nadar contra la corriente o algún día sus esfuerzos iban a dar frutos? Lo que sí sabía era que estaba cansado de la misma situación: ser usado como un juguete por un rato, para después encontrar algo serio con otra persona, hasta que rompieran por algún motivo, y el ciclo se repetía infinitamente, aunque todo cambiará cuando la relación de Namjoon con su alma gemela llegue a su fin.
Advertencia: cualquier cosa narrada en esta historia es solamente ficción/fantasía y no tiene ninguna con las personas cuyos nombres son mencionados. Mención de temas delicados, se solicita discreción.