Tras un matrimonio arreglado y el desprecio de su esposo, Jiang Cheng aún se aferra a la última esperanza que le queda para ser feliz y auyentar la soledad.
Mi aporte para el día 5: Corazón roto y miedos.
Jeongguk siempre soñó con el amor de JiMin, pero su matrimonio no fue más que un acuerdo entre familias. Mientras JiMin se mantenía indiferente, Jeongguk anhelaba su afecto, hasta que un trágico giro lo dejó roto. Ahora, atrapado entre el pasado y el presente, revive cada momento que lo llevó a perderlo todo. ¿Es posible que el amor florezca cuando el dolor ha dejado cicatrices imborrables?