Quiero explicar que estas historias que escribo son solo ficción. Son fantasías que sirven para excitarme a mí y a quien las lea que pueda gustarle este tipo de historias. Pero en la vida real, nadie debería tratar a una mujer así, (o a cualquier persona) sin su consentimiento.
Además, en mis historias no relato la verdadera forma de hacerle buen sexo a una mujer. Esto son solo imágenes que pueden excitar la mente, pero en la vida real a las chicas no les gusta que las follen asi, sin hacer preliminares y olvidándose totalmente del clitoris. Ojo! Porque aunque yo escriba esto porque en mi mente se me ocurran estas historias calientes, con tíos brutos malos que pasen de mi, no quiere decir que a la mayoría de mujeres nos guste esto en la vida real. El cuerpo de la mujer suele funcionar diferente, como se ha explicado ya muchas veces...
Nos puede gustar actuar esta escena, o esta actitud de machote, pero casi siempre será necesario masturbar la vulva o hacer sexo oral para complacer a una chica, y en mis relatos como son de sumisión no hablo de cunilingus ni nada de esto, y pongo el placer del hombre por encima de la mujer ,pero solo es una fantasía!
Aclaro esto porque no querría que mis historias contribuyan a alimentar los falsos estereotipos del porno.
¿Qué pasaría si algún día Dios te sorprende con algo que tú no esperabas para nada?.
La vida de Darian y Skye siempre ha sido bastante simple. Han sido mejores amigas desde siempre debido a que su amistad comenzó dentro de la iglesia en la que se congregan. Solo han sido ellas dos. Dos chicas muy diferentes entre sí, pero eso solo hacia de su amistad una muy especial.
En esa misma iglesia también se congregan tres chicos considerados los "inseparables" debido a que siempre están juntos, quiénes son muy ajenos a ellas debido a que nunca han compartido una sola palabra, a pesar de conocerse por casi seis años y verse prácticamente a diario, aunque sea desde la distancia.
Pero por ciertas circunstancias, se ven obligados a convivir entre ellos por primera vez en mucho tiempo. Comenzando ahí la historia de algo nuevo. Un nuevo capítulo se abre en sus vidas, nuevas situaciones y nuevos sentimientos empiezan a surgir.
Experimentando así que los planes de Dios son perfectos, y que las cosas que él tiene para nosotros no suceden ni tarde ni temprano, sino en el tiempo justo, porque Dios nunca se equivoca.
"Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Eclesiastés 3:1".