Antes de conocerte te amaba y esperaba. No sabía si tus ojos serían cafés, azules o verdes, o si te gustaría más el café o el té. No sabía nada de ti pero aún así te esperaba, aún así te amaba. Ya lo sé todo, sé que tus ojos son cafés, y que realmente prefieres el agua, ya sé que la espera valió la pena y ya sé que te amo. No será fácil librarte de mi, ojos bonitos, y sé que serás lo que me mantendrá despierta muchas noches. Hay almas gemelas que quizás nunca dormirán juntas, sin embargo se soñarán todas las noches.