Segundo libro. Alice mantenía la foto en Milán con Nicolás, colgada a lado de su espejo. Sus zapatos a juego, guardados en perfecto estado, a la vista en su armario. Los anillos de oro y zafiro, que encajaban como ella y el, todos los días en su mano. Alice guardaba fotos de el y Hades, una a cada lado, en el relicario que Meison le regalo. Alice mantenía cerca... Todo lo que sentía, no volvería a poder apreciar como si fuera una primera vez, nunca más. -En corrección.