siempre quise saber cual era la distancia entre la tierra y la luna, y vivía mi vida tranquila hasta que lo conocí a el.
hasta que vi por primera vez sus ojos, que cruzaron mirada con los míos
hasta que me abrazo por primera vez y derritió mi corazón con sus cálidos abrazos
hasta que vimos las estrellas juntos
hasta que tomo mi mano por primera vez
y de pronto lo sentí, el me hizo sentir aquella sensación que había olvidado, me hizo volver a sentir mariposas en mi estomago.
fue en ese momento cuando lo supe, supe cual era esa distancia, que por mas que yo lo quisiera a el, jamás podríamos estar juntos.
porque la distancia que había entre el y yo era grandísima tan grande como mi amor por el.
la distancia se resumía en que yo siempre iba a estar e la tierra,
y el en la luna.
pero esta no es nuestra historia, no es una historia de el y yo, no hay un nosotros porque esta es solo mi historia, la historia en la que a aquel extraño le basto solo una semana para robarme el corazón.
y los corazones robados no siempre vuelven a su dueño de la misma manera en que fueron robados.