- No pude salvarlo.- solté un sollozo después de decir eso, no quería llorar, estaba harta de hacerlo porque sabía que eso no arreglaría nada, pero era lo único que podía hacer. -Hiciste lo mejor, vanya, no fue tu culpa.- me dijo el aún abrazándome, quería creerlo pero algo me lo impedía, no podía superar, y no sabía porque. De pronto siento como el levanta mi cara para mirarme y me susurra con su voz grave- Déjame salvarte vanya- sonreí con tristeza porque sabía a lo que se refería. - no puedes salvar a alguien que no quiere ser salvado, Hunter.- susurre hacia él y me aleje lentamente saliendo de la habitación.