El hombre un poco distraido y algo inquieto pensaba sobre la situacion de su vida, como habia caido la monotonia de vivir por vivir, sin sueños, sin metas, sin ilusiones, como habia caido en la monotonia de sentarse cada tarde a contemplar el sol mientras muere en el horizonte, como habia hecho para poder irse a acostar en una cama fria, como habia dejado que el vicio haya entrado a su vida?, como habia permitido que su vida se tornara sola y lastimosa, de repente recordo aquel instante aquel momento cuando prometio a la estrella benigna, a aquella estrella guardian de su alma, aquella estrella que guardaba algo mas que su ensencia humana.
Recordo como fue que aquella penunbrosa noche miro al cielo suspiro levemente y entre susurro y susurro, pronuncio "Estrella tu que alumbras la noche, tu que apareces de entre las sombras, tu que me has mirado llorar en las noches, quitame esto que ha provocado en mi tanto dolor, tanta angustia y compasion".