La noche oscura traía consigo un frío devastador, y en la penumbra oscuridad unos ojos dorados observan, deleitándose con el temor de su presa. Nadie sabe de dónde viene, nadie sabe a dónde va, pero si te atraviesas en su paso no dudara en tu cabeza cortar. La libertad su destino, sus cuchillos su guardian guardate de el o está noche morirás. Por qué el es el hijo que Gotham reclama sin pesar, devorando toda esperanza y felicidad. Buscando y Buscando en su objetivo no vacilar, pues la Corte va a masacrar. No sé detendrá hasta ver al último Talon destrozado sin piedad.