Mingyu solo quería bailar para quitarse el estrés y encontrar a alguien lindo y dispuesto a pasar la noche con él. Ayudar a un omega angustiado a escapar de las garras de un alfa idiota no era parte de sus planes en absoluto, especialmente cuando resulta que el omega en cuestión es la persona a la que Mingyu, a menudo, cuida a sus cachorros.