Déjame sentir.

¿Quién es lo suficientemente consciente de lo que pasará en su futuro?

Absolutamente nadie.

Porque, por favor, si yo hubiera sido consciente de ello, me hubiera ahorrado todo el maldito dolor de ser posible ¿No creen?

Pues así es queridos amigos, mi nombre es Valerie Collins tengo 18 años de edad, ¿Y qué creen? Los voy a joder con mi maldita historia de vida ¿Les gustará? Verdaderamente no lo sé y ni me importa, porque ahora te aguantas hasta terminar mi trágica historia.

Solo les puedo decir que solo tenía 16 malditos años cuando perdí todo lo que tenía e importaba. Y si bueno, mi niñez fue también una mierda. Pero eso luego lo miraran. A si, ¿por dónde iba?, después de perder todo ¿Qué es lo que hace la vida? Me da un poco de recompensa de tanto sufrimiento, o bueno en parte era así, porque el tener la oportunidad de poder vivir con una persona maravillosa como el Sr. Williams era genial. Lo que no era tan genial era tener que conocer a su hijo… Oliver.

Ya se podrán imaginar por dónde va la cosa, así que si, por ahí va esta historia, llena de frustración, lujuria, insultos, peleas, amistad y sobre todo amor. Un amor que me llevará a cometer tonterías, a confiar en quien no debería, a entregarme por completo y sobre todo el depender tanto de una persona hasta rozar la maldita obsesión, pero no pueden culparme antes de tiempo. Antes de que conozcan quien soy, solo les puedo decir jodidamente lo siguiente mis queridos amigos:

“¿Se le puede llegar amar demasiado a
alguien?

¿Se puede soportar todo por
él?

¿Curar su corazón roto?

No lo sé. Pero una cosa tengo
segura.

Por él lucharía… hasta que me
diga que lo deje de hacer.

Hasta que me diga que… deje de
sentir”