La guerra ha acabado. Pero, ¿A qué costo? Nada volverá a ser lo mismo y nadie volverá a serlo tampoco. Han perdido amigos, familiares, compañeros, conocidos, amados... Harry Potter perdió todo lo que había amado. Entonces, se preguntó; ¿Qué hubiera pasado si hubiera un pequeño cambio? Un cambio pequeño, pero tan grande a la vez que salvaría a millones de personas, y les cambiaría la vida a algunos otros; el mismo Harry estaría incluido. Harry siempre pensó en la felicidad de los demás antes que en la propia. Porque el tenía un corazón tan bondadoso y puro, que era capaz de viajar en el tiempo hasta el 10 de Setiembre de 1934 para cambiar la vida de un Tom Riddle de 7 años. Porque el sabía lo que era una infancia sin amor y soledad, y estaba dispuesto a entregarle a Tom todo el amor y cariño de familia que necesitara. Pero ojalá alguien le hubiera advertido a Harry sobre las personas a las que se encontraría, al mago tenebroso de esa época que tenía una enorme curiosidad sobre él y el porque la varita mas poderosa lo obedecía; sobre sus familiares que jamás conoció o el amor posesivo sobre él, que desarrollara el mismo niño por el que terminó en ese lugar.