¿Cómo matar a tu prometido? KTH y Tn

El ambiente lúgubre y el incesante olor a incienso le daban la bienvenida a los nuevos visitantes que con pesar se abrían paso entre la multitud. Las cámaras no dejaban de tomar fotos, haciendo todo más incómodo y logrando molestar en demasía a aquellos que realmente sentían dolor al estar frente a la foto de ese hombre.

Choi WooJin fue -por mucho- un hombre destacable. Siempre amable y comprensivo con cada uno de sus allegados y quienes apenas mantenían una relación de conocidos, le recordaban por su actuar galante y gran cuenta en el banco,la cual sería vaciada en donaciones benéficas a varios centros de educación,salud y algunas organizaciones. Muchos se habían asombrado con tal noticia, lo tacharon de loco al instante porque ¡vamos!¿Quién gastaría toda su fortuna en eso?, pero para Choi era mejor así. No tenía hijos y su esposa había fallecido hacía ya un buen tiempo por lo que no había a quien dejar fortuna alguna, tan solo había puesto dos nombres en su testamento; Kim SangTae y Park Nakyung. Él junto a ese par habían sido mejores amigos desde que tenía memoria, los únicos con quien compartiría el fruto de su largo trabajo, o bueno...algo así había reflejado en aquel pálido papel.

¡¿Qué?! ¡¿El primero en casarse?!