Un fotógrafo.
Un pintor.
Una sesión de fotos.
El tiempo era pesado, habían pasado siglos y sus memorias se habían disipado, ni siquiera hablaban de ellos en los libros de historia, y las pinturas que esas manos habían hecho, adornaban museos bajo su pseudónimo.
Sin embargo, las almas no olvidan esa conexión eterna que se forma entre dos personas cuando se aman como ellos se amaron, ese vínculo trascendía las barreras del tiempo, de la vida y la muerte misma.
Siglos después de sus muertes, cuando la humanidad era otra totalmente, Seungho y Nakyum tienen otra oportunidad de encontrarse, de amarse, de sentir la plenitud al lado de la persona correcta, llenando el vacío que los había torturado durante toda su vida, aunque no comprendieran el motivo.
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Las letras de la portada son mías, el dibujo es un fanart de @miutaso2degi en Twitter, tiene bellos fanarts, incluido el que inspiró este fic, que lo dejaré dentro del primer capítulo.
Na-kyum es un joven de 19 años que llegó a un pequeño pueblo a las afueras de corea del sur a visitar a su Noona por las vacaciones de verano.
Un día salió al bosque cercano de la casa para así pintar algo para su regreso a la universidad, pero mientras está pintando se queda dormido sin percatarse que la noche estaba llegando, para después de despertar encontrarse en la profunda oscuridad y con miedo empezar a regresar a la casa, sin darse cuenta que una extraña criatura lo estaba siguiendo.
Na-kyum X seungho vampiro.
Los personajes obviamente no me pertenecen.