He aquí contaré una historia de una mujer única, de una mujer hermosa, en cuya vida la tragedia fue su pan de cada día, y su única compañía y consuelo en sus últimos momentos no era más que la alegría de no dañar a nadie más. Ya llegado sus noventa o tal vez cien años, su rostro seguía hermoso como los días de antaño, mas se encerró ella misma para no hacer más daño, pues desde su trágico nacimiento, hasta su fea partida, le fue otorgado un don único pero letal por ser mujer. Su belleza era mortífera, una trampa su corazón, mas su don residía en dar infalible defunción, que tocaba a la puerta de quien llegara a desearla.
Cuenta una leyenda, de una muy antigua secta que en una hora negra nacerá una niña única, nacerá una niña bella, con la pureza de las aguas, la sensualidad de afrodita, la astucia fatal de la antigua reina Cleopatra y una mortal hermosura infinita que seducirá naciones destinadas a perecer por su belleza no bendita.
Después de ser rechazado por segunda vez por el Equipo Avatar, incluso después de ayudarlos con Combustion Man, Zuko decide dejarlos solos y buscar un lugar donde vivir.
pero después de una pelea contra soldados de la Nación del Fuego y caer en el lecho de un río.
Al ver su arrepentimiento y dolor, el espíritu del Sol y la Luna deciden darle una segunda oportunidad, enviándolo a otro mundo con otro destino y gente que lo apreciará y admirará.