Cuando lo conocí, supe que algo tenia en especial, y si. Fue ese gran paquete que tenia. Cada vez que lo veía, nos divertimos mucho en la cama, me hacía sentir en las nubes. Me dejaba que jugará con el, cada vez que le hiciera sentir algo bonito. Era hermoso tenerlo entre n mis manos, esos un poco más de 19 cm y si no es que más. Cada vez que lo tenia adentró, podía sentir su grosor, era fascinante. Fuimos obligados a separarnos, de parte de mi hermana, pero aún así seguíamos con ese juego que A los dos nos gustaba mucho más de lo que podíamos creer.