Julieta vivía cada día igual al siguiente y al anterior, igual al resto de la sociedad, pero ella era diferente a los demás, y lo sabía, pero ni siquiera se lo comentó a sus más allegados por miedo a no ver la luz solar del siguiente día, hasta que un día de forma imprevista conoce a personas que le cuentan qué es lo que es, y que no se encuentra sola. Conoce al amor, al odio, y a la tristeza. Tendrá que tomar decisiones que marcarán su vida y a cualquiera que le rodee.