En "Ciento once notas", nos sumergimos en la vida de Donita, quien desde temprana edad se ve envuelta en una historia de amistad, amor y separación con el Sr. Rojo, el chico que una vez fue el centro de su mundo en la secundaria. A través de los pasajes emotivos de la memoria, el libro nos lleva desde los días iniciales de su amistad, pasando por los momentos de incertidumbre y esperanza, hasta un reencuentro sorprendente años después.
El relato se teje con los recuerdos vívidos de los días de escuela, donde la complicidad juvenil y los primeros destellos del romance marcan el inicio de una conexión profunda. Sin embargo, el destino los separa prematuramente, dejando preguntas sin respuesta y corazones inquietos.
Años más tarde, un mensaje inesperado revive la llama de lo que una vez fue, llevando a Donita a enfrentar los fantasmas del pasado y las posibilidades del presente. El reencuentro con el Sr. Rojo despierta emociones enterradas y desafía las expectativas de ambos, mientras exploran si aún queda algo por descubrir entre ellos.
"Ciento once notas" es más que una historia de amor perdido y reencontrado; es un viaje íntimo a través del tiempo, donde el amor y la nostalgia se entrelazan en una narrativa emotiva y cautivadora. Con cada página, el lector se sumerge en la profundidad de los sentimientos y las decisiones que moldean nuestras vidas, recordándonos que el pasado y el presente pueden converger en formas inesperadas.
Recordó las palabras del médico "lo encontraron casi muerto" "es un milagro", abrió lentamente sus ónix observando a la nada, él no debería estar vivo, no merecía estarlo, había hecho demasiado daño, era un asesino, un criminal, apretó su puño con frustración recordando aquella vez en su infancia cuando se lanzó al precipicio "nadie en verdad desea morir" no, él en verdad deseaba morir, tragó pesado sintiendo lágrimas caer de sus ojos y rodar por su mejilla, él debía morir ¿Por qué la vida se aferraba a mantenerlo en existencia?
*Esta historia es mia, prohibida su copia y reproducción*
*Naruto y sus personajes pertenecen a Masashi Kishimoto*
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