-Puaj, vedre feo- hace una mueca mientras tapa su naricita con sus dedos. -Cachorro, papi se pondrá triste si se entera- intenta chantajear, pero en cuanto las palabras salen de su boca se arrepiente. El pequeño reconoce el apelativo al instante, y el ojiazul mayor nota cómo el ceño de su hijo se frunce lentamente y sus labios empiezan a temblar. Louis ha entrado en terreno peligroso, se ha tirado a la fosa de lo leones él solo. -No- solloza Ben pasando un puñito sobre sus ojitos. -Quiero papi, extraño a papi- y el desastre se desata. Louis toma a su pequeño cachorro en brazos y libera feromonas para calmarlo, el espacio se llena de olor a café y roble silvestre; pero ni siquiera esa acción ayuda en absoluto, porque de pronto, gruesas lágrimas caen por las mejillas del niño, cuales cascadas en creciente inundación. -No llores, mi sol, no llores- la desesperación se apodera de Louis al notar la roja nariz de su cachorro, su alfa se remueve inquieto en su pecho demandándole hacer algo útil. -Iremos donde papi, ¿sí?- es lo único en lo que consigue pensar, le hace falta su omega. -Ambos extrañamos mucho a papi y lo necesitamos. O. Donde Harry está en la cima de su carrera, grabando y produciendo novedosos videos musicales, mientras su pequeño cachorro lo extraña todo el tiempo y su alfa hace todo lo posible por cuidar de su pequeña familia en crecimiento.