Bienvenidxs a la segunda parte de ¿Tejiendo Alas?
Han pasado casi 4 años desde que nació Gael, desde que Hugo y Eva se dieron otra oportunidad, desde que dejó de ser un juego la familia feliz y se hizo una realidad.
Aunque en todo cuento hay una parte que no nos cuentan, una detrás de ese fueron felices y comieron perdices.
Y ahora vamos a descubrirla.
"Una libreta queda atrás, otra está en el cajón guardada, esperando quizá el día que necesite abrirla, que necesite volver a volcarme ahí para no perderme.
Una vida comenzaba, pero tenía fecha de caducidad y nosotros sin saberlo.
Una fecha que ninguno de los supo adivinar.
Un fin que ninguna madre está preparada para soportar.
Podemos soportar rupturas con el amor de nuestra vida, yo lo he hecho.
¿Pero como se asimila que no puedes proteger eternamente a tu hijo?"
Caminos sin asfaltar, lagunas, vidrios rotos, grietas, tormentas, tornados, terremotos.
Dificultades.
Pero todo no va a ser malo ¿No?
Risas, miradas, carcajadas, el pecho lleno, el corazón latiendo.
Aunque esos momentos pueden ser tan efímeros que si los escribes, pronto quedarán atrás, olvidados.