Una chica, no tímida pero tampoco extrovertida; su única familia era su madre, sólo eran ellas dos en una pequeña casa; ella la amaba quería lo mejor para ambas. En la escuela no era la mejor ni la peor. Su madre era una prostituta y vendedora de drogas, adicta a ellas y al alcohol; algunas veces la obligaba a trabajar para ella. Hasta que un día todo eso terminó y Rapunzel comenzó a vivir en su propio cuento; pero no de hadas.