Los dioses nunca les habían dado nada, ahora le estaban quitando lo único que tenía. Su preciosa hermana, su razón de vivir. Ume lo era todo para él. ¿Por qué tenía que pasar esto? ¿Por qué a ellos dos? Nadie vino a ayudarlos. Todos eran una mierda. Iban a morir, su hermanita iba a morir. Al menos eso pensaba antes de ver a una persona extenderles su mano.