Cielo azul: Sin sol.

El restaurante era de baja calidad. La única razón por la cual la gente venía a ese lugar era el helado. Para los humanos probablemente era delicioso, pero como ya no podia saborear las cosas no tenia sentido comerlo. Mi compañero, el gordo, parecia tener el mismo desinteres. Pero, a diferencia de mi, no se esforcó por ocultarlo.
La puerta se abre de nuevo. Me doy vuelta, esperando nuestro anfitreón, pero solo eran dos chicos de 15 años..... y uno parecia ser mi gemelo. Me da un susto tremendo, no era posible que el era mi repetido. Pero... la manera en la que se movía, como levantaba los brazos para señalar, su aparencia física.... era un espejo con mi imagen.
La puerta se abre otra vez. Esta vez entra una mujer de aprox. 21 años, que parece simplemente un modelo. Era nuestra presa.
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