"Cuando me di cuenta de su presencia, y ella se percató de esto, levantó una mano y me dio un pulgar arriba, mientras decía algo que no llegué a escuchar, pero vi su boca moverse, luego me apuntó y después, el pulgar que estaba levantando, lo pasó lentamente por su cuello, como haciendo el gesto de cortarlo. No sabía dónde esconderme, ni que hacer, ¿hace cuánto tiempo estaba mirándome? Y... ¿Acaso me estaba amenazando?"