Preciosa yegua de cabellos negros. Bello animal salvaje, con un espíritu original. Poderosa como el fuego, delicada como el cristal. Rápida como la luz, eléctrica como un rayo, ágil como un guepardo y tiene un poder tan fuerte en su cuerpo y en sus bellos rasgos que la embellecen, que podía saltar tan pero tan alto, que era capaz de volar... La llamaban Dronning, ¿porqué ese misterioso nombre? Significaba Reina en Noruego. Porque en Noruega, una leyenda oculta entre los más profundos sabios, se hallaban en sus inteligentes cabezas. Una yegua dirigía a todos los caballos que podías imaginar. Los Dronning, eran una raza extraña de caballo, que solo los Noruegos sabían que existían. Ellos eran los únicos animales sin alas que podían volar con sus poderosas patas. Pero de repente una noche, cuando la luna llena estaba en lo más alto del cielo, desaparecieron. Nunca supieron porqué, unos sabios pensaban que se habían extinguido, y otros solo decían que se habían escondido. La debilidad de Lisa siempre fueron los misterios y los caballos. Un día, sus padres se mudan con sus abuelos a Noruega, y ella se entera por el conserje loco del colegio, que él había visto a una yegua negra, y que juraba por su corazón, que era la única que quedaba de la raza Dronning. Adora los misterios, adora los caballos. No hay que decir más para saber que ella se volverá loca buscando a aquella yegua negra como la noche.