Siempre fuiste tú

Maddison y Hunter no entienden por qué se siente tan familiar estar juntos como si se hayan conocido de toda la vida. Ambos durante esta vida, aprenderán que son un espejo, que lo que odian de la otra persona, es lo que reprimen y odian de sí mismos. En donde el ego es el principal factor del porque siempre estén en constante pelea, ya que ambos son como dos huracanes y ninguno de los dos va a bajar a ser categoría lluvia intensa, porque es rendirse a ver quién es más fuerte. Sin embargo, como todo huracán, irán destruyendo todo a su paso, hasta lo que más aman en la vida y tal vez romperán lazos con otras personas que tal vez pudieron ser su alma gemela. Para conocer su historia de amor, ambos conocen personas que los han lastimado y traicionado, haciendo remarcar la famosa frase, eres la persona perfecta, pero en el tiempo equivocado.