Solo era una niña cuando el futuro de Anahí se decidió. Todo estaba claro, debía estudiar en el mejor internado para señoritas, aprender cómo mantener una casa y a su marido contento pero, sobre todo, era su deber llegar virgen al matrimonio. No estaba unida a su padre, pero aun así cumplía con su deber y el deber de su familia. Su madre se había casado con su padre mediante un matrimonio de conveniencia para salvaguardar el bien de su familia, lo mismo que su abuela y la madre de esta. Así que ella también debía aceptar ser la esposa de Matthew Collins por el bien de su familia, y de su futuro.