Hace mucho tiempo existió en la lejanas tierras del Japón un gran señor Shogun de nombre Taira que tenía una preciosa hija de nombre Tatsumiro, al mismo tiempo que ella nació, el capitán de samuráis tuvo un hijo de nombre Yoshitsune, y quedo destinado que el seria criado como su padre, enseñado en las artes del samurái para proteger y velar por la seguridad de Tatsumiro, con el paso del tiempo ambos fueron creciendo en distintos ambientes pero aun así nada evitaba que ellos se hubieran conocido y no solo eso, que hubiesen hecho una entrañable amistad conforme fueron creciendo Yoshitsune se mostro fascinado por la belleza de Tatsumiro el cual iba creciendo día con día sin dejar de ser sencilla y amable con cuantos la rodeaban por eso gozaba de gran popularidad entre los sirvientes de su padre y todos le mostraban un gran respeto el cual se torno en una inquebrantable lealtad hacia su padre, Yoshitsune la comparaba con las más hermosas flores que le habían enseñad