-¿Qué? A caso no hay un beso reservado por ahí para mí.-digo hacercandome más a ellá. Baja la cabeza y sonrie algo avergonzada.-Joder me encanta verla así de timida y vulnerable ante mí, me la imaguino desnuda, toda mojada y siento que se me está poniendo dura solo de imaguinarla gimiendo cerca de mi oido y.....por Dios soy un pervertido. -Imbecil.-dice,se acerca hasta donde estoy y me abraza. Siento que el tiempo se detiene cuando la tengo nuevamente entre mis brazos, me percato de como se tensa ante mi tacto, aspiro su delicioso aroma y le susurro muy cerca del oido para que solo lo escuche ellá. -Te he hechado de menos.